jueves, 22 de marzo de 2012

Siempre he sido de Unión

Asi es no más. Desde el 72, una vez que vine a Santiago con mi papá (Wanderino) y mi tío Juan (Colocolino), a ver un partido en el nacional del Colo con Wanderers. Antes jugaron Unión y la U.
No se por que, pero desde ese día seguí al rojo. Ya van 40 años de hincha y 23 de socio.
Hoy, es además un punto de encuentro con mis hermanos Cristian y Javier, mi sobrino Quique y mis hijos Glauco, Carla y mi pequeña Emilia que ya es socia a sus tres años.
Aqui les comparto un enlace del "Flaco" un blogista de la Unión que subió esta entrada, alimentada de varios comentarios que me traen grandes recuerdos.
Grande Unión!!
A los hinchas mas nuevos, denle una miradita.
http://unionensantalaura.blogspot.com/2007/05/el-ftbol-de-los-ochenta.html

Don Pira

viernes, 2 de marzo de 2012

Pez Fetono: Una historia real

Una historia real
(Esto le paso a un amigo….)
Trabajaba en una empresa de Santiago de mas de 2000 viejos. El baño para los empleados quedaba en un segundo piso, y habían 6 cubículos con 6 tazas independientes, para los pensadores.
Habían dos viejos muy pelusas que trabajaban allí, y cada vez que uno de ellos iba al baño a hacer cacú, el otro esperaba que estuviera sentado y empezaba a joderlo, le tiraba agua, le metía un trapero por los pies, golpeaba la puerta, avisaba a todo el que entraba que estabas allí, te apuraba, pero en especial siempre se asomaba por arriba de la taza y empezaba a conversarte, le tiraba papel picado, y el otro, el que estaba sentado, no podía cagar tranquilo.
Así también, casi todos los empleados de ese piso, sabían de este absurdo juego, y cuando Ricardito iba al baño, le avisaban a Pedrito para que fuera a molestarlo. Y viceversa. (Los nombres reales han sido cambiados no se para que)
Llegó un buen dia, en que el jefe de la sección, fue a hacer cacú,  en que uno de esos colegas, a quien llamaremos Carlitos, le avisó a Pedrito que estaba Ricardito en el baño (indicándole el baño donde estaba “el jefe”)
Como un resorte, salió Pedrito a joder a Ricardito, subiéndose como de costumbre al baño del lado, y ¡¡¡sorpresa!!!. No era Ricardito sino el jefe de ambos, que sentado en la taza y que con una cara que ni les explico, preguntó ¿que pasa?. Uyyy trágatelo tierra.
Afuera del baño, en una asamblea humana de empleados que sabían de la talla, no paraban de reírse del pobre Pedrito.
Esta es palabra del Señor.
Te alabamos, Te bendecimos, Te damos gracias.